Ver a Martí y ni enamorarse de su simpatía es imposible. Esos ojos son pura vida y ese brillo natural que tiene es espectacularmente revitalizante.
He de confesaros que Papá Noel tuvo un poco de envidia de él (se hace mayor....JO, JO, JOOOO)
Este es un resumen de la tarde en la que Martí regaló muchas sonrisas :)
Feliz día de Navidad a todas las familias que andéis por aquí !!!
A y C...enhorabuena por esta familia bonita que habéis formado!! Besos y gracias por confiar en mi para guardaros estos momentos!!